Es noche de luna llena, de luz refleja, de paz iluminada, en frío invierno.
Se avanza sin miedo vencidas las tinieblas, y el susurro muy quedo penetra hasta más adentro.
Fascina, extasía, atrae, embelesa, y surge la alabanza: “Y por la hermana luna de blanca luz menor…”
Es verdad la noche, el frío, el hielo, el dolor del sin techo. Solo la belleza vence en el desierto y merma el duelo.