TEXTO BÍBLICO
“Nadie tiene amor más grande que el que da la vida por sus amigos. Vosotros sois mis amigos si hacéis lo que yo os mando. Ya no os llamo siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor: a vosotros os llamo amigos, porque todo lo que he oído a mi Padre os lo he dado a conocer. No sois vosotros los que me habéis elegido, soy yo quien os he elegido y os he destinado para que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto permanezca. De modo que lo que pidáis al Padre en mi nombre os lo dé. Esto os mando: que os améis unos a otros” (Jn 15, 13-17).
COMENTARIO
En principio, desde la traducción que pone la frase en condicional: “Si hacéis lo que yo os mando”, parece que la amistad de Jesús está sujeta a nuestro comportamiento, cuando Él se entrega por toda la humanidad, y ha asumido nuestra naturaleza para dignificarla y deificarla. Más bien habría que entender que la amistad que nos ofrece Jesús de manera abierta, la disfrutamos si aceptamos lo que Él nos indica. Jesús por su parte nos revela su amor: para esto ha venido al mundo, para salvarlo.
IMAGEN: LA AMISTAD
Jesús se nos muestra abierto a la relación amiga, elige a compañeros de camino, aprecia la hospitalidad, se deja querer, gusta de espacios de intimidad con los suyos, les confiesa su amor y los declara amigos. En estos tiempos recios, dice Santa Teresa, convienen amigos fuertes de Dios para sustentar a los flacos. El mensaje pascual se desborda en gestos entrañables del Maestro para con los suyos, gestos que se convierten en pauta para anunciar la novedad del Evangelio, desde un mensaje de misericordia, mansedumbre y bondad. Quien se siente amado, se mueve a amar.
PROPUESTA
¿Te sientes amigo de Jesús?
