
“Ved que os he dado toda hierba de semilla que existe sobre la haz de toda la tierra, así como todo árbol que lleva fruto de semilla; para vosotros será de alimento” (Gen 1, 29).
EL ÁRBOL DEL PARAÍSO
CONSIDERACIÓN
El contemplativo sabe ver en las cosas creadas la mano de su Hacedor, y todo le lleva a considerar la presencia y virtud de la bondad en todo creado. Dice san Benito en su Regla: Considere los útiles del monasterio como vasos sagrados del altar”. La llamada a cuidar de la Casa Común no solo es tener sensibilidad ecológica, sino saber descubrir la sacramentalidad de la materia. En Adviento, los belenistas saben tomar los elementos más humildes para representar el misterio de la Navidad.
PROPUESTA
¿Cómo tratas las cosas y la naturaleza?