
TEXTO BÍBLICO
“Y los sacó hasta cerca de Betania y, levantando sus manos, los bendijo. Y mientras los bendecía, se separó de ellos, y fue llevado hacia el cielo. Ellos se postraron ante él y se volvieron a Jerusalén con gran alegría; y estaban siempre en el templo bendiciendo a Dios” (Lc 24, 50-53).
COMENTARIO
El que vino del cielo, vuelve al cielo, y se lleva nuestra humanidad glorificada. Para siempre, en Dios, en su misterio trinitario está nuestra naturaleza humana, unida a la naturaleza divina del Hijo amado de Dios. Dios no solo nos creó, sino que en la plenitud del tiempo, nos manifestó el amor que nos tiene encarnándose en el seno de María, y haciéndose uno de nosotros. En el Resucitado ascendido a los cielos, celebramos el triunfo de nuestra humanidad.
IMAGEN: SOBRE EL MONTE
PROPUESTA
¿Sientes la alegría de saberte glorificado en Jesucristo?