TEXTO PROFÉTICO

“El Señor es un Dios eterno. Fortalece a quien está cansado, acrecienta el vigor del exhausto. Se cansan los muchachos, se fatigan, los jóvenes tropiezan y vacilan; pero los que esperan en el Señor renuevan sus fuerzas, echan alas como las águilas, corren y no se fatigan, caminan y no se cansan” (Isa 40, 28-31).

TEXTO EVANGÉLICO

Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera” (Mt 11, 28-30)

COMENTARIO

La fuerza que viene de la naturaleza acompaña mientras se tiene capacidad, mas la fuerza que acompaña a los débiles es del Señor: “Mi fuerza y mi poder es del Señor”.

San Pablo llega a decir que cuando soy débil, entonces soy fuerte (2Cor 12, 10). Y el salmista: “Es inútil que madruguéis que veléis hasta muy tarde, Dios da el pan a sus amigos, mientras duermen” (Sal 126).

Dios fortalece al que espera en Él, y Jesús se ofrece a aliviar el cansancio de los que se agobian en el camino de la existencia. ¡Qué bueno es saber que en la etapa hay posada, mesa, descanso! Jesús se ofrece como posada, banquete y tregua en la fatiga.

PROPUESTA

Descansa en el Señor

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